Pocos sitios son tan conocidos en la provincia de Ourense como los Canóns do Sil, pero que pasa con la gente que nunca vino y no sabe lo que son. Pues estos Canóns son verdaderos desfiladeros producidos por la erosión fluvial del río Sil, que ha labrado sin pausa la profunda grieta que lo conduce hasta desembocar en la izquierda del Miño. Su inclinación es bastante importante, llegando incluso en algunos puntos a ser casi vertical y alcanzando una altura máxima de 500 mts. Su longitud es de alrededor de unos 30 km, aunque si contamos también los de la parte del Miño podemos rondar los 50 km. A lo largo de todos estos cañones podemos encontrar numerosos pueblos e imponentes monumentos que buscaron en ellos fuente de riqueza y al mismo tiempo protección. Hoy en día muchos de ellos dedicados totalmente al turismo y agricultura aguantan el paso de los años manteniendo costumbres ancestrales como si el tiempo no pasara por ellos.
También en sus paredes imposibles buscaron refugio monjes y eremitas que con la misma paciencia secular las poblaron de monasterios. Hasta una docena de cenobios, románicos y benedictinos la mayoría, que le dieron el nombre ya documentado desde la Edad Media de Rivoyra Sacrata (Ribeira Sacra) Varios ejemplos de estos monumentos son los monasterios de Santa Cristina de Rivas de Sil, el Mosteiro de Santo Estevo o incluso ya en la zona alta la iglesia y castillo de Castro Caldelas.
Aunque se trate de uno de los mejores espacios naturales definidos por los dos grandes ríos, nadie sabe dónde comienza y acaba exactamente la Ribeira Sacra. Puede que sus límites verdaderos vengan dados por la presencia de las vides en las laderas de solana. De aquí salían los vinos de Amandi que alcanzaron fama de exquisitos ya en tiempos del Imperio romano, y hoy cuentan con una Denominación de Origen que los ampara. De estos vinos podemos encontrar numerosos ejemplos en sus orillas. Ascendiendo desde el mismo río hasta los puntos más altos de la montaña podemos ver miles de vides plantadas de forma escalonada en la tierra. Observando bien esto os daréis cuenta del importante trabajo que lleva su cosecha, pero es una forma de mantener siempre húmedo el lugar y al mismo tiempo de hacer que siempre le lleguen rayos de sol, algo que le da un sabor diferente y que produce unos vinos de gran calidad apreciados en todo el mundo.
La naturaleza más agreste encuentra su sitio en los afloramientos graníticos revestidos de matorrales y bosques de castaños y robles. Las peculiares condiciones climáticas de las zonas más resguardadas favorecen la presencia de especies mediterráneas como los alcornoques y los madroños. El conjunto de rocas altas de las gargantas se han citado en ocasiones como uno de los últimos refugios de las aves rapaces más amenazadas. Fue y sigue siendo un paisaje natural impresionante que se conserva prácticamente igual (excepto por lo numerosos embalses que se han construido) que hace siglos.
Su recorrido pasa por números pueblos como son Castro Caldelas,Montederramo, A Teixeira, Parada de Sil, Nogueira de Ramuín y A Peroxa en la provincia de Ourense; y los de Chantada, Carballedo, O Saviñao, Pantón, Sober, Monforte de Lemos, A Pobra de Brollón y Ribas de Sil en la provincia de Lugo, todos ellos con restos de monumentos antiguos, miradores y casas de época. Ya en su tramo final se une al río Miño en la localidad de Os Peares famosa además de sus cañones por su impresionante presa, la más grande de Ourense.

Una de las formas más espectaculares de conocer la Ribeira Sacra es por el agua, ya que desde aquí se aprecia mucho mejor su imponente altura y la fuerte pendiente de estos desfiladeros. Los dos cursos fluviales son navegables en catamarán. El Sil desde los embarcaderos ourensanos de Santo Estevo (Nogueira de Ramuín) y Abeleda (Castro Caldelas) y el Miño desde la localidad luguesa de Belesar (O Saviñao). Los itinerarios turísticos tienen su recorrido por el corazón mismo del paisaje en catamaranes con el techo de cristal y guias que nos irán contando todo los que vemos y las peculiares historias de cada lugar. Si estáis interesados en coger alguno de estos barcos podéis consultar horarios, tarifas y recorridos en la web http://www.riosil.com/, en donde además de encontrar toda esta información podréis incluso reservar circuitos o ver como llegar.

Otra cosa que llama bastante la atención es que para acceder a ellos tendremos que pasar en numerosas ocasiones por inmensos bosques de castaños muy espesos, haciendo que a veces el camino parezca un túnel en medio de la espesura de color verde y marrón. También cruzaremos numerosas cascadas y ríos que se unen al Sil, creando imponentes saltos de agua.

Para poder apreciar realmente en un concepto más general su naturaleza deberemos ascender hasta los numerosos miradores que podemos encontrar a lo largo de sus 30 kms. Los más importantes y visitados son los miradores de Parada do Sil (como los balcones de Madrid, un mirador de vértigo sobre el abismo, y en la otra orilla del río veremos el santuario de Cadeiras (Sober) y la llanura de Monforte como horizonte), además de los de Vilouxe y Caxide (en donde se alcanza la mayor altitud) o Doade, en donde podremos ver un claro ejemplo del cultivo de la vid.

Si escogéis Galicia como destino turístico es un destino prácticamente imprescindible, ya que en pocos kilometros podréis ver gran parte de nuestra cultura y costumbres, que son lo que realmente se recuerda de un pueblo una vez lo abandonamos para volver a casa. Aunque aquí solo os hablo de los cañones como un concepto general os iré enseñando estas semanas que viene uno a uno los lugares más interesantes, así que si os interesa el tema permaneced atentos a la web.

Unos videos de este precioso lugar.... (os recomiendo especialmente el primero)

Os dejo aqui una vista aerea de parte del recorrido y el enlace al google earth a Parada de Sil, desde donde podréis recorrerlos fácilmente hacia cualquier lado, ya que está bastante centrado y tiene próximos varios puentes.

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